El ácido hilaurónico ha recabado, por derecho propio, una popularidad más que merecida dada su efectividad. Su aplicación en tratamientos de estetica dental y las ventajas de su uso son los dos conceptos fundamentales que se desarrollan a continuación.
¿Cuáles son los tratamientos de estética dental que completa el ácido hialurónico?
Antes de responder a esta pregunta, es necesario aclarar en qué consiste este componente. En primer lugar, has de recordar que este ácido lo produce el organismo de manera natural. A partir de cierta edad, sus niveles descienden de forma progresiva provocando, entre otras secuelas, la pérdida de elastina y de colágeno en la piel que rodea la zona de la boca.
Así, tras un blanqueamiento dental, las incrustaciones y las coronas sin metal, las carillas o un tratamiento de ortodoncia pueden ser las opciones más recomendables. Sin embargo, cabe recordar que también es efectivo este ácido para regenerar la mucosa y las encías, así como para aliviar las consecuencias de una patología en el maxilar o en la mandíbula.
Resulta conveniente su uso para corregir las líneas de expresión y el código de barras sobre los labios. Mejora el perfilado de los labios, evita la sonrisa gingival y contribuye a rellenar las papilas situadas entre los dientes.
¿Cómo se aplica?
Se utiliza una aguja de pequeño tamaño a través de la cual se inyecta este componente. Suele utilizarse una pequeña cantidad en cada ocasión, ya que sus efectos son progresivos y naturales.
Antes de este procedimiento, se administra anestesia local para adormecer la zona, por lo que el tratamiento es indoloro para el paciente. El ácido incide en la generación del colágeno consiguiendo que el cuerpo vuelva a realizar esta función de forma natural.
Poco a poco se van apreciando los cambios y solo es necesario repetir esta técnica de forma periódica para disfrutar de los mejores resultados. Merece tu atención que esta técnica, aunque la sustancia inyectada no procede del propio paciente, sí permite evitar los efectos secundarios de otros compuestos químicos al tratarse de uno que el organismo reconoce como propio.
¿Quién puede aplicar este tipo de ácido?
Con independencia del uso que se le vaya a otorgar, siempre debe ser aplicado por un especialista con la formación y la experiencia requeridas. En la odontología este tratamiento es un complemento a los arriba expuestos.
Resulta imprescindible confiar exclusivamente tanto en profesionales como en una clínica que ofrezca todas las garantías de salubridad posibles. Caer en el error de apostar por un centro de estética no reconocido como tal supone arriesgar tu estado de salud y exponerte a posibles complicaciones, fácilmente evitables eligiendo una opción que ofrezca mayores garantías y seguridad.
Valorando la información anterior, es más fácil entender por qué el ácido hilaurónico también puede formar parte de un tratamiento odontológico para mejorar la estética dental de cualquier persona. Su absorción progresiva y sus visibles resultados permiten confirmar que la efectividad de esta sustancia es indudable y de enorme utilidad para mejorar la imagen personal. No dudes en dejarte asesorar por los expertos en la materia.